02 marzo 2011

Futbolista Luis Moreno y el incidente de la lechuza

Este artículo se refiere al incidente en que el futbolista profesional panameño Luis Moreno (Deportivo Pereira, Colombia) utilizó su pierna izquierda para sacar del área de juego del Estadio Metropolitano Roberto Meléndez, de Barranquilla, a una lechuza que, aparentemente, es la mascota del equipo anfitrión (Junior de Barranquilla). La lechuza había sobrevolado el referido estadio y se había posado en la cancha, en medio del fragor del partido que se estaba jugando en el instante en que ocurrieron los hechos.

En vista del exagerado despliegue internacional que se le ha dado a lo acontecido, se hacen los siguientes comentarios:

1) En primer lugar, NUNCA DEBIÓ permitirse el vuelo de la lechuza sobre el campo de juego, en medio del fragor de un partido de fútbol profesional, por el peligro potencial que esto podía representar para el ave. Si las autoridades colombianas de ambiente o de protección de animales desean aplicar sanciones al jugador Moreno, también tendrían que aplicar las mismas a quienes permitieron el arriesgado vuelo del ave en ese momento (aparentemente, era una tradición local). La justicia verdadera tiene que ser aplicada a todos los involucrados en el hecho. Es justo, ¿no?

2) El término patada, para alguien que no haya visto el ya famoso video, puede ser interpretado como una agresión brutal y con saña contra la lechuza. Todas las personas razonables saben que esto no fue así. Moreno trató de sacar al ave del área de juego, para evitar que algún jugador la pisoteara accidentalmente y la destrozara de verdad. Quizá no se atrevió a tomarla con sus manos, previendo que el ave pudiera atacarlo y la empujó con su pie pero NO LA PATEÓ CON FUERZA. Si lo hubiera hecho, habría roto todos los huesos del animal y este habría muerto inmediatamente. El examen veterinario reveló que el animal NO TENÍA NINGÚN HUESO ROTO. Es más, el ave se recuperó y se pensó que podía ser dada de alta pero murió poco después, desafortunadamente, debido a una miopatía por captura, según el dictamen del médico veterinario que atendió el caso.

3) Hay que recordar que, antes de la desafortunada intervención del jugador Moreno, la lechuza recibió un fuerte balonazo que la dejó completamente atontada y tendida en el campo de juegos. ¿Ya los acusadores olvidaron esta parte? Entonces, también hay que señalar la irresponsabilidad de permitir el vuelo del ave en pleno partido, sabiendo lo peligroso que esto podía ser para el animal, como quedó demostrado. Aqui no vale eso de que "cada vez que el ave sobrevuela el campo el equipo Junior gana el juego". Si castigan a Moreno, también tendrían que castigar a quienes permitieron que el ave sobrevolara el campo de juego, los verdaderos culpables.

4) Ciertamente, los medios masivos de comunicación han dado a este incidente un destaque internacional completamente desproporcionado, que no va de acuerdo con lo sucedido. Han satanizado al jugador Moreno al punto que pareciera que hubiera cometido un crimen de lesa humanidad, como a diario si cometen abiertamente muchos "líderes" políticos o de movimientos extremistas de algunos países de nuestro planeta, que asesinan vilmente a sus compatriotas con el único fin de mantenerse en el poder o desestabilizar al gobierno de turno. Ante esta triste realidad, ¿dónde están los hipócritas que han hecho de este incidente de la lechuza un escándalo de proporciones internacionales?

5) Ya el jugador Moreno pidió disculpas y ofreció sus explicaciones al respecto. ¿Qué más puede hacer? ¿Qué más quieren? ¿Destruir su carrera? Hay un interés malsano y/o una cultura de violencia en la mente de quienes festinan con esto. En las páginas de ciertos diarios colombianos e internacionales que han publicado esta BASURA periodística, hay quienes han señalado que Moreno debe ser linchado, que es un animal, que es un maldito, que es un ignorante y un largo etcétera de epítetos injustos y denigrantes. Incluso, ha recibido amenazas de muerte a través de algunas redes sociales, razón por la cuál su familia está sumamente preocupada. Hay que poner un alto a esta actitud negativa, peligrosa e irresponsable, especialmente a través de la intervención de los periodistas serios y objetivos que, gracias a Dios, son la gran mayoría.

6) Por último (no porque Moreno sea panameño, igual que el autor de este Blog), hay que detener, inmediatamente, esta vorágine insensata. Moreno, en el peor de los casos, debería recibir algún tipo de advertencia o amonestación leve y ya. Él no es un maleante, ni un asesino, ni un traficante de drogas o armas y tampoco ha infringido (que se sepa) ninguna norma futbolística, ni nada por el estilo. Si quieren sancionarlo, que lo hagan, pero que sea una sanción proporcional con lo sucedido que, dicho sea de paso, no fue realizado de forma premeditada ni con alevosía. Pero, si Moreno es sancionado, quienes permitieron el vuelo del ave sobre el campo de juego, los verdaderos responsables del triste incidente, también deben recibir una sanción similar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

señor si usted no vio la patada tan "%$&/&Y que ese jugador le pega a la lechuza .... hombre use gafas, y si las estaba usando en ese momento, cámbielas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Eric Manuel dijo...

El diagnóstico del veterinario habla por si solo, señor. Además, las vulgaridades y amenazas que él jugador recibió están desproporcionadas pues lo sucedido no ameritaba esto. Por eso el mundo anda como anda, por los pensamientos violentos de muchos.